Los módulos de CPU de procesos son parte del rango específico de aplicación de la serie iQ-R de MELSEC y tiene cuatro CPUs disponibles con capacidades de memoria entre 80 k y 1200 k pasos. Han sido diseñados especialmente para aplicaciones entre medianas y grandes, en la tecnología de procesos, en las que resulta especialmente importante un procesamiento de los datos a alta velocidad y el tratamiento de regulaciones PID muy complejas.